Como está Costa Rica de acuerdo con la OCDE (2023)
Artículo publicado originalmente por CRHoy. Link del artículo.
El análisis económico del país publicado por la OCDE dice en resumen que Costa Rica se recuperó bien de la recesión inducida por la pandemia. Los resultados sostenidos y resilientes de las exportaciones de bienes y servicios siguen respaldando el crecimiento, mientras que el consumo se ve obstaculizado por los altos precios, la poca competencia y el elevado desempleo. La situación fiscal mejoró, pero sigue siendo difícil, lo que requiere esfuerzos sostenidos para contener el gasto e impulsar la eficiencia del sector público durante varios años. Mantener y reforzar el compromiso con la inversión extranjera directa y el comercio internacional, que han sido claves para diversificar la canasta exportadora, y mejorar las condiciones para que las empresas locales prosperen son desafíos clave para mejorar los niveles de vida y la creación de empleo formal. Esto requeriría reducir la carga regulatoria, mejorar la combinación de impuestos, fomentar la competencia en mercados clave y continuar los esfuerzos de descarbonización y protección del medio ambiente. Apoyar una mayor participación laboral femenina y mejorar la protección social ayudará a adaptarse a los cambios demográficos en curso y mejorar la igualdad de oportunidades. La educación y la formación son una alta prioridad para Costa Rica, que les dedica una de las mayores proporciones de gasto entre los países de la OCDE. Sin embargo, los resultados educativos siguen siendo deficientes y las empresas luchan por cubrir sus vacantes, particularmente en puestos técnicos y científicos. Es necesario mejorar la eficiencia y la calidad del gasto público en educación para apoyar mejor el crecimiento y la equidad.
Las empresas luchan por cubrir vacantes, particularmente en puestos técnicos y científicos, poniendo en peligro la capacidad de Costa Rica para atraer más y mejor inversión extranjera directa. Sólo el 20% de los graduados siguen estudios en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM en sus siglas en inglés), una proporción similar a la de 2016. Revisar los mecanismos de financiamiento de las universidades puede mejorar la rendición de cuentas y la capacidad de respuesta a las necesidades del mercado laboral. Las recientes reformas en la educación vocacional apuntan a aumentar la oferta y la calidad de los técnicos. Esto reduciría los desajustes de habilidades y ayudaría a acceder a empleos formales.
De acuerdo con la UCR, las universidades estatales destacan como los centros educativos de Costa Rica que cuentan con la mayor oferta educativa en el área STEM, con un total de 467 carreras. Según datos del Consejo Nacional de Rectores (CONARE), en la última década las universidades públicas han logrado un aumento de la cantidad de diplomas otorgados en carreras STEM, pasando de 4.542 títulos en el 2014 a un total de 6.431 en el 2022. Sin embargo, eso no es suficiente para cerrar la brecha entre la oferta y la demanda por profesionales de esta área.
El último estudio publicado por el Observatorio Laboral de Profesiones (OLAP) reporta que para el 2022 el 35% de los encuestados son graduados de carreras STEM y que ellos tienen un desempleo 3 veces menor que el desempleo a nivel nacional del 2022. También tienen menor nivel de subempleo por horas, menor porcentaje de trabajos con poca relación con lo que estudiaron y salarios de entrada mucho mayores al promedio nacional.
Por último, las universidades públicas reconocen que las necesidades tecnológicas van más rápido que la capacidad de diseño, puesta en práctica y graduación en nuevas carreras. Y eso pone en riesgo cerrar la brecha de oferta y demanda de capital humano en las carreras más demandadas del sector productivo de Costa Rica. Sin embargo, en vez de modificar periódicamente el Plan Nacional de la Educación Superior Universitaria Estatal sería más rápido y sencillo, por ejemplo, aumentar el porcentaje del FEES asignado al TEC. Esa casa de estudios se especializa en graduar excelentes ingenieros de distintas especialidades, pero recibió solo el 11% del FEES del 2024. Con esos recursos asignados el TEC solo puede aceptar cerca de 2.000 personas cada año, cifra que es insuficiente para ir cerrando la brecha de oferta y demanda por ingenieros, especialmente ahora que el país tiene planes de incrementar el valor agregado de su participación en la cadena global de semiconductores.