El aumento de las utilidades reinvertidas en la inversión extranjera en EE. UU.

IED

Artículo originalmente publicado por CRHoy. Link del artículo.

De acuerdo con fDi Intelligence las utilidades reinvertidas representaron más de 190 mil millones de dólares de los flujos financieros de inversión extranjera directa (IED) en Estados Unidos en 2023. La proporción de las utilidades reinvertidas aumentó del 17,6% en 2016 al 66% en 2023.

¿Por qué es importante?

Las utilidades reinvertidas indican una fuerte expansión de las operaciones extranjeras existentes en busca de mayores rendimientos, pero también indican menos nuevas inversiones de capital y capital fresco en Estados Unidos.

Las utilidades reinvertidas se han convertido en una fuente más importante de IED en Estados Unidos a medida que el crecimiento económico del país apuntala las tasas de rendimiento mientras el costo del nuevo capital para la inversión sigue siendo alto. Más de 190.000 millones de dólares de los flujos financieros totales de IED a EE. UU. estuvieron compuestos por ganancias reinvertidas en 2023, el segundo nivel más alto después de los 212.000 millones de dólares registrados un año antes, según las estadísticas oficiales de balanza de pagos elaboradas por la Oficina de Análisis Económico (BEA en sus siglas en inglés).

Las utilidades reinvertidas son la diferencia entre las utilidades de una filial en Estados Unidos en un año determinado y los dividendos que envía a su casa matriz ese mismo año. También han ido creciendo en términos relativos. La proporción de las utilidades reinvertidas en los flujos financieros de IED en Estados Unidos ha aumentado del 17,6% en 2016 al 66% en 2023, según cálculos de IED basados ​​en datos de la BEA. Durante el mismo período, la IED financiada a través de otras formas de capital cayó del 70,5% al ​​40,2%, mientras que la contribución neta de la deuda fue negativa en un 6%.

Un factor importante que influye en las decisiones de las multinacionales de reinvertir localmente las ganancias de sus filiales se remonta a la tasa de rendimiento de esa inversión. Según los últimos datos elaborados por la BEA, la tasa de rendimiento de la IED entrante osciló en torno al 6% tanto en 2021 como en 2022, el nivel más alto desde 2014, mientras la economía estadounidense lideraba la recuperación económica de otros importantes bloques económicos desarrollados tras la pandemia del COVID-19. Desde esta perspectiva, las utilidades reinvertidas tienden a ser un mejor indicador de las inversiones reales y son menos volátiles que la deuda y otras formas de capital en la IED. De acuerdo con los expertos estas reinversiones son más reflejo de las inversiones reales en la economía, ya que las entidades extranjeras reinvierten sus utilidades estadounidenses en la ampliación de la capacidad y la huella global.  El aumento de la IED reinvertida en Estados Unidos también refleja cambios de políticas y estrategias corporativas.

La Ley de Empleos y Reducción de Impuestos (TCJA en sus siglas en inglés), que entró en vigor durante la administración Trump en 2018, redujo la tasa del impuesto corporativo del 35% al ​​21%, lo que impulsó la rentabilidad neta de las filiales estadounidenses de empresas extranjeras.

Un documento del FMI de 2022 encontró que tanto la IED sobre las utilidades reinvertidas como las inversiones en propiedades, planta y equipo respondieron positivamente a la reforma de la TCJA, pero la IED financiada con nuevo capital o deuda no lo hizo.

Una investigación realizada por Hansen y Wagner, dos economistas chilenos, muestra que los países con un mayor acervo de IED de entrada tienden a tener también un mayor nivel de IED sobre utilidades reinvertidas. Pero advierten que una mayor IED sobre utilidades no distribuidas no necesariamente se traduce en un mayor gasto de capital. Al observar únicamente las utilidades reinvertidas de la IED, no hay forma de saber si el pasivo de esta empresa termina en una inversión reflejada en activos fijos, como máquinas y propiedades, o en activos circulantes como efectivo.

Las altas tasas de rendimiento normalmente deberían impulsar nuevas inversiones en cualquier forma de capital. El hecho de que las utilidades reinvertidas en EE. UU. estén aumentando, mientras que otros tipos de inversión en acciones, principalmente en forma de nuevas inyecciones de capital procedente del extranjero, estén disminuyendo, añade matices al sentimiento actual de la comunidad de inversionistas en EE. UU.  Las tasas de interés más altas de los últimos años, que incrementan el costo tanto del capital como de la deuda y, por lo tanto, encarecen el gasto de capital, y un mayor escrutinio de las fusiones y adquisiciones entrantes a través del Comité de Inversión Extranjera de Estados Unidos (CFIUS en sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro están contribuyendo a un entorno más difícil para las empresas que buscan ingresar a los EE. UU. por primera vez (fDi Intelligence, 2024).


¿Qué pasa en Costa Rica?

A partir del 2016 la reinversión de utilidades con 47,8% ha sido el componente financiero más importante de la IED que llega a Costa Rica.  El récord se presentó en 2022 con más de 82,1%.


La rentabilidad promedio del acervo de IED ha crecido sostenidamente desde 5,1% en 2016 al 9,3% en 2023. La correlación es positiva y fuerte entre esta rentabilidad y los flujos de reinversión de utilidades.

Las empresas estadounidenses operando en Costa Rica tienen incentivos adicionales a la alta rentabilidad para no repatriar utilidades y reinvertirlas en el país. Cambios en el procedimiento de impuestos para empresas multinacionales redujeron drásticamente las tasas impositivas efectivas sobre los ingresos extranjeros al permitir que las corporaciones multinacionales con sede en los EE. UU. retrasaran indefinidamente los impuestos estadounidenses y solo pagaran la tasa impositiva de los países con impuestos bajos siempre y cuando no repatriaran directamente los ingresos de los países con bajos impuestos a la casa matriz estadounidense.

Para mantener este excelente desempeño de las empresas extranjeras operando en el país se debe proteger el marco regulatorio de las Zonas Francas y cerrar el gap que existe entre la oferta y demanda por talento humano calificado. Nuestro futuro exitoso solo depende de nosotros.

Sandro Zolezzi

Chileno-Costarricense. Ingeniero Civil-Industrial con énfasis en optimización de recursos de la Universidad de Chile, con una Maestría en Administración de Negocios con énfasis en economía y finanzas del INCAE Business School de Costa Rica.

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